PRP facial, beneficios para la mujer.

PRP para rejuvenecimiento facial

El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es un producto que se obtiene del propio paciente, por ello no ocasiona problemas de alergias ni de rechazos.

Actualmente, la bioestimulación con PRP es uno de los principales tratamientos para el rejuvenecimiento de la piel.

La técnica de PRP permite aislar y utilizar los factores de crecimiento, que están presentes en la sangre del paciente para estimular la regeneración de los tejidos.

¿En qué consiste la bioestimulación con PRP?

Para obtener el PRP se extrae unos 20 cc de sangre del paciente, luego se la coloca en una centrifugadora que se encargará de separar la sangre en varias partes: hematíes, leucocitos, plasma pobre en plaquetas, y plasma rico en plaquetas (PRP).

Al PRP, se le añade un compuesto cálcico para activar las plaquetas y que liberen los factores de crecimiento, ellos son los elementos clave del tratamiento.

A continuación, se aplica el PRP en la piel de la cara, el escote y/o cuello, mediante microinyecciones para estimular la regeneración de la piel y conseguir un aspecto más joven.

¿Qué beneficios cutáneos conseguimos con el PRP?

  • Aumentar la elasticidad, la luminosidad, y el grosor de la piel.
  • Disminuir la flacidez.
  • Atenuar las arrugas.
  • Mejorar el envejecimiento cutáneo.

Valoración previa al tratamiento

Visita médica: Historia clínica

  • Antecedentes personales patológicos: colagenopatías, diabetes.
  • Tratamientos previos: anticoagulantes, antiinflamatorios.
  • Exploración física: tipo de arrugas, cantidad y localización.
  • Registro de imágenes clínicas.

Esta terapia regenerativa no precisa la realización de pruebas previas. Es ambulatoria y mínimamente invasiva.

Suelen preguntarnos sobre el PRP …

¿A qué edad es aconsejable realizar el PRP facial?

El PRP se puede aplicar a cualquier edad, para ralentizar el proceso de envejecimiento de la piel.

En Entredones lo recomendamos a partir de los 30 años, edad en la que la piel comienza a perder su poder de regeneración.

¿Cuándo se aprecian los resultados?

Los resultados son apreciables desde los primeros días, y alcanzan el punto máximo a los 20 a 30 días de la aplicación. Desde la última sesión de PRP, los resultados duran aproximadamente 1 año.

¿Es necesario administrar anestesia?                  

En general no es necesario, aunque en algunos casos se puede aplicar frío o anestesia local en la zona a tratar.

¿Cuántas sesiones se suelen realizar?

El número de sesiones y su periodicidad dependen de las características de la piel del paciente. Generalmente se recomiendan 3 sesiones el primer año, y se realizan cada 4 o 6 semanas. El tratamiento de mantenimiento sugerido es 1 o 2 sesiones al año.

¿Cuánto tiempo debo estar en Entredones para realizar el PRP?

Desde la extracción de sangre hasta la aplicación del PRP el tiempo que se permanece en el Centro es aproximadamente una hora.

¿Qué cuidados debo tener después de realizar el PRP?

Evitar en las primeras 24 horas:

  • Exposición al sol (usar fotoprotector facial con SPF mayor a 50).
  • Saunas, duchas calientes, hidromasajes.
  • Masaje en la zona tratada.
  • El ejercicio intenso.
  • Medicamentos antiinflamatorios o anticoagulantes.
  • Maquillaje.
  • Alcohol o tabaco.

¿Hay efectos secundarios?

Se puede realizar vida normal al finalizar la sesión, aunque suele aparecer de forma transitoria un leve enrojecimiento e hinchazón, que calma con frío local. 

¿El PRP facial tiene complicaciones?

Es una técnica regenerativa segura. No se observan complicaciones, dado que se trabaja con material autólogo (del paciente)

¿Cuánto duran los efectos?

Una vez que hemos conseguido estimular de manera eficaz los tejidos con las 3 sesiones del primer año, los resultados se mantienen durante 6 a 12 meses.

¿Es posible combinar este tratamiento con otras técnicas estéticas?

Si. La combinación de diferentes técnicas produce mejores resultados y más duraderos porque cada tratamiento actúa de manera diferente.

En Entredones, ofrecemos a nuestras pacientes la bioestimulación facial con PRP junto a otras técnicas antienvejecimiento: ácido hialurónico y/o toxina botulínica.